Nuestras joyas se elaboran de manera artesanal con diversos materiales que requieren un tipo de limpieza determinado. A continuación te detallamos algunos consejos a seguir en función del tipo de pieza:

PIEZAS BAÑADAS EN PLATA:
La plata de 1ª ley puede reaccionar oscureciéndose debido a la exposición al aire y a la luz o, en algunos casos determinados, por los diferentes tipos de Ph de la piel. Adopta un tono amarillento ennegrecido. Para limpiar este tipo de piezas te recomendamos hacerlo mediante un paño suave o con un limpiador de plata no abrasivo para evitar daños o sumergir la pieza diez minutos en agua caliente con jabón líquido o bicarbonato de sodio y, si fuese necesario, también se puede utilizar un cepillo suave para remover la suciedad con más facilidad. El último paso es secar cuidadosamente la pieza con un paño seco para darle brillo. Los resultados pueden verse de inmediato.

PIEZAS BAÑADAS EN ORO:
El oro puede oxidarse en contacto con el aire y puede adoptar un tono rojizo. Para la correcta limpieza de estas piezas, te recomendamos usar un paño de algodón suave de forma periódica (semanalmente) para mantener la joya en buen estado. En el caso de que la pieza esté muy sucia puedes utilizar ese mismo paño con agua tibia y jabón neutro, y una vez finalizado el proceso, secarla con un paño seco y suave o un papel.  Hay que tener cuidado con el cuero y las piedras o cristales que tenga la pieza, puesto que estos materiales pueden requerir otro tipo de cuidados.
Puede darse el caso de que, con el paso de los años, pierda parte de su brillo, en este caso, la única opción posible a la pérdida de brillo / color es realizar a la pieza un nuevo baño en Oro para que recupere el aspecto inicial.

¿CÓMO GUARDAR LAS PIEZAS?
Para que tu pieza se mantenga como nueva, te recomendamos guardarla en una bolsa individual, en su embalaje original o en una caja cerrada, para evitar que las joyas se rayen. Intenta evitar que entre en contacto con el aire, con luz directa o con humedades, ya que esto puede conllevar un deterioro de la pieza.
Ten en cuenta que a las joyas les afecta mucho el Ph exterior por lo que es importante evitar, en la medida de lo posible, el contacto con perfumes u otros productos cosméticos.

Las joyas con cristales y/o esmalte, así como las perlas cultivadas o nácar de origen orgánico, son especialmente sensibles a los productos químicos (lacas, perfumes, cremas…). Para limpiarlos, un paño de algodón húmedo y una gota de jabón neutro son lo más adecuado.

Nuestras joyas no se repararán, reemplazarán o sustituirán que en opinión de la empresa haya sido sometido a uso inadecuado o abuso, intentos de reparación, modificaciones, negligencia, accidentes o haya sufrido desgaste por uso normal.